Las tarjetas de crédito son ofrecidas como una herramienta que soluciona todos los problemas que las personas puedan imaginarse, la llave de la puerta de la felicidad en una simple tarjeta de plástico que te otorga el banco para facilitar tu vida.
A pesar de esto, no todo es color rosa cuando se trata de usar tarjetas de crédito, así que debes tener en cuenta ciertos detalles relacionados a su uso y mantenimiento.
Uso limitado de la tarjeta de crédito
Uno de los principales errores de los usuarios bancarios es creer que pueden bajar las estrellas y la luna con una tarjeta de crédito. Sin embargo, estas tarjetas no son una fuente de dinero ilimitado que tendrás siempre para ti.
Al contrario, las tarjetas de crédito te ayudan con tus finanzas, pero con la presencia de ciertos límites y fechas de pago. Ten cuidado al usar tarjetas de crédito, estando al pendiente de los límites de tu tarjeta y para que lo necesitas.
Emergencias y necesidades
Usar tarjetas de crédito no es para comprar un helado todos los días, si este es el uso que le estas dando podrá traerte consecuencias económicas a futuro.
Mantén tus tarjetas de crédito disponibles para cuando se te presente una emergencia, como es el caso de los problemas de salud que son realmente inesperados, la compra de algo que necesitas, y que no puedes costear con el dinero que posees, o pagos urgentes.
Pago de las tarjetas de crédito
Otro detalle importante a tomar en cuenta al usar tarjetas de crédito es el pago de estas mismas. Toda tarjeta de crédito presenta fechas límites para pagar una cantidad mínima de la deuda que se tiene con el banco.
Lo más recomendable es tratar de evitar que esta fecha llegue y no se haya efectuado el pago que pide el banco. De hecho, puedes pagar un poco más del pago mínimo si deseas que tu deuda disminuya con rapidez.
Además, estar al día con el pago de tus tarjetas hará más posible que te concedan un aumento de crédito.
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